Historia de un viernes!

utah weona estoy con la Dani y esta muerta más encima llegaron los pacos..."señorita, carabineros de chile"....jajaja fue una de las cosas mas resonantes en una de los carretes mas extaciantes y deportivos de mi vida. Si, así comenzó una noche que pensaba sería un poco menos normal, pero nunca tanto. Si señora, señor, fui a Creamfields 2009, mi primera experiencia en un festival de música electrónica que partió cuando me junte con Beto a beber algo antes de entrar y cuando encontramos un lugar en aquella ciudad llena de lugares recónditos para beber cerveza con intranquilidad una chica nos dice, porfa ayudenme mi amiga esta muerta...bueno, muerta de borracha y sin duda con fuertes sustancias alucinógenas en su sangre, con Beto no sabíamos si sentir pena o envidia ante tal circunstancia.
Después de sostener la cabellera del la chica para que no sufriera los estragos de exceso de pisco, ron y cañitos varios, logré que pusiera sus dos pies sobre tierra y comenzara a caminar, no sin antes haberme sentido un delicuente de quinceañero cuando los pacos nos solicitan el carnet, hasta aqui no más llegamos me dije, pero por alguna fuerza extraña de la noche, se ríen, hachamos la talla como buenos amigos y me hacen entrega de mi sixpack para seguir bebiendo con responsabilidad en la calle.
Ante tanta suerte decidimos entrar a aquella noche espectacular, en definitiva lo pase bkn!, nunca me había movido tanto, no me habia volado escuchando los beats de una canción, cambios y mezclas que me llevaban de ciudad empresarial a la playa Abanico, si me sentía teletransportado con matices descollantes en mi mente.
Fue una noche que pudo ser arruinada por el simple hecho de una chica borracha que nos hizo pecar de buenos samaritanos, pero que finalmente tuvo la recompenza de forma extraña pero sencillamente extravagante.

SMS... el poder de la tecnología!

Desde hace tiempo me cuesta despertar en las mañanas, me quedo varios minutos pensando en lo que es la vida, como voy y hacia donde voy. De cierta forma creo que aprendí a dejar que las cosas fluyeran sin tener que estar guiándolas todo el tiempo. Me siento bien, llegue a la hora hoy después de que desafortunadamente a algún pajarito se le ocurrió cerrar la lave de paso de agua. Cuando venia en el metro me senti un pate de ternera.. jaja si una oveja embutida en un plástico de lo ajustado que veníamos, pero al aprecer la gente estaba más relejada que ayer y pude llegar sin contratiempos, por fin, a la agencia. Me conecté y vi el nick de la Maca.... No, no quiero que te mueras!!! cortarla!! ¬¬!..... en fin estaba siendo acosado telefonicamente y vía email por el trabajo que al parecer esta aumentando junto con mis ganas de seguir en esto, hasta que ring ring!, vibra mi pantalón, mi jefe queda con cara de extrañeza y pensando que era un sms de la compañía de teléfonos que tengo diciendome que podría ganarme 1 millón de pesos por enésima vez este mes....silencio y una sonrisa se resbala por mi labio inferior, eras tú.
Pude sentir como las mariposas se alborotan dentro de mi estomago y como la ansiedad me juega una mala pasada y no deja disfrutar el momento y leo el mensaje con inmediatez.
Dijiste lo necesario, después de meses de estar aquí esperando una señal, la obtengo, quizás no es nada, pero me gusta pensar en la magia de esto y en cuanto la tecnología me aporta para estar allí contigo.
Sí, creo que he logrado por fin profundizar mis sentimientos, de lograr que me veas aquí, parásito donde estoy observandote y no me canso de hacerlo. De tener que preguntar y sentirme culpable o muy obvio, eso ya da lo mismo, creo que ser obvio contigo es lo mejor que me ha pasado, me hace sentir liviano, relajado. De cierta forma no quiero dejar de sentirme así, menos si tu eres la razón de aquello.

Care Raja.

Hace un par de semanas estaba en la agencia, tratando de concentrarme , pero no podía, ni siquiera el cauto sonido de una "sinfonía agridulce" lograba abstraerme de mi mente que estaba en cualquier parte menos en la planilla de excel frente a mis ojos. En eso, con un escueto sonido, mi celular anuncia la llegada de un mensaje, es ella...sí, ella. La persona que me hizo volver a ser un pendejo hasta hace un par de meses atrás y con la cual pasé muy buenos tiempos a su lado, que fueron pocos, pero intensos, de esos que uno no quiere olvidar por más que lo desea.
En pocas letras lograba reproducir en mi lo que pensé estaba perdido y de hecho, me llamo tanto la atención sus palabras como la intención de dicho mensaje. Debo reconocer que mi primera reacción fue relucir una sonrisa muy contenida que solo me hizo pensar dentro de mi orgullo..."siempre vuelven, al final siempre lo hacen".
Cuento corto decidí agregarla, nuevamente, a mi msn y a mi facebook, intercambiamos un par de mails, en los que me dejo entrever que aún le sucedían cosas conmigo y yo por supuesto tentando a la suerte me lance en una suerte de atrevida caída libre, pero esta vez, con el paracaídas puesto. Decidimos vernos este fin de semana recien pasado, pero por circunstancias que no entendía ella prefería verme a solas. Al final no pudimos vernos, pero se intercambiaron mensajes por msn, bastante decidores en cuanto a lo que sucedería si nos vemos.
En fin, menos mal que no fui, ayer para mi asombro me doy cuenta que esta pololeando, que ella fue con su pololo a donde nos ibamos a juntar y que por eso las excusas baratas. Tarde me di cuenta de que ella no queria algo más que fuera el otro, el plato de segunda mesa o quizás hasta el postre. de pura maldad postee en su Facebook todo y la mande a la xuxa, pero eso fue para satisfacer la cobranza de sentirme estafado nada más.
Hoy al pensar en lo sucedido, me da risa, me río solo al darme cuenta que hay personas muy care raja en esta vida, personas que no quieren perder ni pan ni pedazos, y que gracias a una glotonería exagerada, después se quejan cuando la misma naturaleza de la vida se encarga de cobrarles ese pecado capital, ese que ninguno de nosotros se atreve a reconocer en público y que ocultamos de amistades intimas, de la familia y evidentemente, de la pareja de turno. Es que hay que ser muy care raja de buscar a tu ex, mientras estas pololeando con otro.
La verdad, no sé que siento con eso detalladamente, solo sé que no siento ya nada por ella y me sirvio esto para darme cuenta, pero lo que me preocupa es que no me gusto el sabor de que ella fuera la patuda conmigo, ¿será acaso que estoy acostumbrado a ser yo el patudo?. Mmmm, es algo que me da para reflexionar.-

identificación.

A veces la vida nos entrega, con el tiempo, ciertas verdades que, por mucho que deseamos escucharlas, a veces ni siquiera queremos oírlas, porque son demasiado obvias y en parte un poco filosas para nuestros sentimientos y estados de animo diarios. 
Algo así ocurrió hace un par de días atrás, pero antes de relatar la situación debo decir que siempre, desde que tengo 18 años más menos, me he llevado muy bien con el género femenino, no sé si es por mis ganas de analizar todo, a todos y a la vida, mi forma de reflexionar o mi faceta de psicólogo amateur; pero aunque no me considero un gran hombre o de gran éxito en el amor, siempre termino llevándome mejor con el sexo opuesto. después de tal aclaración me siento conspiradamente preparado para relatar el hecho que hundió mi cabeza en un balde con agua heladisima y me hizo despertar, de cierta manera, de la modorra que encerraban mis pensamientos.
Estaba yo, como buen parroquiano en un viaje de placer, cuando dos lindas y guapas mujeres(es lo que podía observar desde mi humilde palco), conversaban sobre hombres y sobre el amor, que según mi opinión se pone un poco mezquino a cierta edad. Yo no podía de dejar de escuchar la linda voz de una de ellas, hasta que se manda una frase que me dejo constipado, impactado, de una rabia interna de carácter febril..."es tan lindo, todo lo que quiero, pero no me gusta"... con eso lo dijo todo, sentí tanta pena y a la vez una ofensa contra un sujeto que se la estaba jugando por una mujer de la forma más leal y sencilla puede haber, con la sinceridad de decir, en actos, me interesas, y que de cierta forma este siendo ultrajado emocionalmente por una mujer, que en ese instante al menos, demostró acertadamente el todo, del porque tengo rechazo enorme a jugarmela por alguna mujer en estos momentos. Me justifico absolutamente todo, pero quede con ese gusto amargo en el paladar de querer defender lo indefendible, de querer hablar por aquél ignorante e indefenso ser humano que cree una cosa, porque demuestran algo, pero por otro no esta ni cerca de poder ser lo que desea ser.
Después de tal información y febril rabia interna, me deje llevar, a lugares oscuros y recónditos mientras duró el viaje, ya que por fin entendí el porqué de algunos rechazos y el porque de ciertas frustraciones de mis historias con mujeres. Me sentí identificado con este hombre, pero apenado y frustrado. 
Lección?? Aprendí que,0 por el momento, no hay que confiar en las mujeres, por mucho que tu corazón así lo desee.

Cuenta bancaria...

Yapo!!... suena a una exigencia de alguien que tiene una suerte de cuenta bancaria en que le aguantas que con aquella expresión de exigencia, porque para que sepa ud. uno es un ser humano y como buen hombre, no me gusta que me exijan. Es más, yo soy de los patudos y descarados que exige a los demás, pero teniendo siempre la suerte de no dejar que me exijan más de lo que quiero dar. 
Cuando exigen, la situación muchas veces no nos acomoda, sobre todo viniendo de alguien que apenas conoces.
  Es una suerte de encrucijada, en la que se prefiere muchas veces omitir aquella revolucionaria frase de.... yapo!!!.  Es increíble lo que una expresión tan chilena puede enmarcar, esas dos sencillas palabras, pueden decir todo y a la vez nada; pero es lo que es no más, la forma más chilena de decir"hasta cuando te espero".

Pero, ¿por qué esperas algo de mi?, no deberían esperar nada de nadie, así sería más fácil no tener decepciones futuras, ni hacerse expectativas de la gente, exigir parece refácil, pero cuando se va un poquito más allá de la frase uno devela un mar de incertidumbres. En fin, que me quisite decir con ese YAPO!!, no lo sé, pero lo estoy descubriendo.


Farandu-Politica, Episodio II (el ataque del hijo)

Hace un par de años atrás, cuando era un asiduo de las tomas, asambleas, paros y marchas estudiantiles de mi universidad, que a pesar de no tener la aprobación de mis padres, de igual manera participaba de todo eso, me sentía un revolucionario, quería ser parte de un movimiento nuevo, de un quiebre en la izquierda chilena que mostrara el descontento de la juventud hacia la envejecida (en mármol) clase política chilena. 
Yo, si fijese ud, era un pendejo que se alzo contra el director de su carrera, contra el mismo pdte de Federación de entonces y hasta contra mis propios compañeros muchas veces. No me sentía como un che Guevara, ni mucho menos como un Castro, más bien me sentía como un pendejo que quería conquistar el mundo, todo un cerebro sin su pinky.

En fin, hoy por hoy me aleje del sabor del activísimo político y me dedique a mis nuevos estudios, y a otras cosas, pero siempre atento a la contingencia nacional. Hasta que me di cuenta de que había un par de personajes nuevos que llegaron a remecer y a declarar la guerra revolucionaria de ideas y más que de ideologías pasadas, de razonamiento critico y constructivo en un mundo 2009 y no en 1973. Si, puede ser cruel, me pueden acusar de no tener memoria, pero creo que después de casi 40 años, no tener memoria seria un privilegio, no para mi, sino para mis hijos que aun no tengo, y para la vejez de cada uno de nosotros. 

Por esta razón es que manifiesto publica y abiertamente mi apoyo al hijo prodigo, que nada tiene que ver con las índoles y raíces políticas de su padre, ni menos las de su padrastro, es más bien, una alternativa de creer en que queremos crecer como país y cambiar el cuoteo político y por sobre todo, el cinismo político ante los micrófonos.

Marco Enríquez - Ominami, tienes mi voto.

Un Cabro Chico

Después de mucho pensarlo, deletreando una y otra vez más esas sencillas palabras en mi mente, lo dije, mejor dicho: lo escribí. Sí pude decir a esa persona que esta solo a medio metro de distancia de mi todos los días desde hace un par de semanas lo guapa que se veía con esos pantalones negros ajustados, su blanca polera de tirantes y botas negras. 
Fue inevitable, cada vez que se reía o paseaba cercana era como un desafìo a mis ganas de decirle, te ves guapa. Bueno quizás para algunas personas sea muy fácil decirlo de frente, pero para mi en especial no lo es. Es como un pesar de sentirse tonto o de que te cataloguen como parte de esa maraña de hombres zombies que siguen a una mujer guapa con la mirada de cordero degollado. No, yo no quiero ser de esa clase, ni menos en este caso, sencillamente porque disfruto diciendo a un mujer guapa (cuando lo es), lo bien que se ve.
Es un deleite ante la sorpresa que puede conllevar su reacción y de lo sencillo que es llegar a una mujer cuando le reconoces sus virtudes fisiológicas.
Bueno, siento desviarme tanto del tema, pero es para que quede claro cuanto admiro a la forma femenina en todos sus aspectos. 

Como puede ser que me sea tan difícil decirle a una mujer lo guapa que se ve?, será cosa de timides?, pues la verdad es mejor muchas veces no decir ciertas cosas que decirlas, por eso del prejuicio y de que te digan "me estas acosando". Para mi ese día viernes fue como una revelación ante mis ojos, ante mi sentido de la curiosidad alimentado por las ganas de saber quien es la persona que vive 8 hrs diarias a tu lado. Pues me lleve una sorpresa. y creo que a pesar de ello , aun no terminaré de sorprenderme. Por eso me gusta como soy, un cabro chico que disfruta cuando rompe el envoltorio del dulce para ver como es, así sencillamente un cabro chico.

Farandu-Politica, Episodio I (la amenaza de la Jiles)


Existen situaciones que uno no siente que debe darle importancia necesaria, quizás porque no nos afectan o sencillamente, porque son de una ridiculez exorbitante. Una de estas situaciones, o más bien personajes de farandu-política chilena es Pamela Jiles, que a medida que pasa el tiempo me convenzo más en que su apellido no es mera coincidencia.
Después de su mal llamada "perfomance" frente al palacio de la moneda en la cual se vistió de generala y subió a una siliconada mujer en sus piernas, que después hizo un "Desnudo artístico" me reí muchisimo, pero mientras reía uno de esos flashes que se cruzan por la mente humana me di cuenta de que ella (la Jiles), no estaba ironizando con alguna situación de contingencia política, ni menos apelando a la igualdad del sexo femenino y por muy lejos apelando a hacer un acto de reivindicación homosexual la muy Jiles estaba hablando en serio, quedé impactado, no porque fuera grave el tema que deba ser llevado al consejo de inDefensa del Estado, sino porque simplemente que es un claro ejemplo del parecido entre política y la farandula. Cual es ese parecido dirá ud, es que simplemente en la farándula y en la alta clase política, la gente se pitio.

Este es el el Chile de hoy, en donde ya no es extraño que una mujer se vista como un general, en un país donde ser un general-presidente no es algo que sea bien digerido por el pueblo y en donde empelotarse frente al palacio de la República es digno de ser llamado un "Desnudo artístico" y que más aún sea proclamado como un acto para reunir firmas y ser candidata presidencial. Eso es algo que no se ve todos los días y no me parece menos extraño, pero como bien dice una frase por  ahí...."Chile un país de contrastes"

La fila.

Desde que llegue a esta gran ciudad he tenido grandes, gratas y desagradables experiencias a lo largo de estos 3 y pico meses de trabajo. Pues sí, como ud. debe estar pensando yo no soy Santiaguino (y gracias al dios en que no creo no lo soy), soy un provinciano más que llego con su maletita de sueños, proyectos, aspiraciones y todas aquellas cosas que el ser un "chico de pueblo", implica.

Y sí, esta historia implica justamente como mi evolución  personal va llevándome por el camino de ser un santiaguino más, cosa que no sé si es tragedia griega o bien solo una anécdota de la vida en esta ciudad.
Yo en mi ciudad, pueblo o provincia como ud. quiera llamarle, llamada Valparaíso siempre tuve la ventaja de tomar un bus, el trolebus, o hasta un ascensor para llegar a mi destino, y en el camino podías sortear peatones, un poco de congestión digno de una ciudad con calles pequeñas y muchas micros que como resultado ensalsaban el ambiente con una sinfonía de bocinas motores acelerados y hasta algún improperio para quien indignamente conduce a la defensiva, pero siempre recordando que somos región, lejanos a la vil y mundana vida acelerada que llevan los santiaguinos. Así es la vida en mi puerto querido, apasiblemente tranquila y enchuchante a veces.

Pues bien, cuando llegue a Santiago tuve la suerte y ventaja de vivir con un primo y su Familia, y aún mejor suerte de que él trabaje a dos cuadras de donde yo comencé mi practica profesional, por lo cual me vengo en auto todas las mañanas disfrutando del paisaje de la cordillera y de oxigenados tacones acelerados, que me recuerdan porque el verano es tan lindo. Durante el pasar de los días uno se va dando cuenta que aquí en Santiago, si hay taco en las mañanas no te tocan la bocina, que la gente cuando va a tomar micro hace fila sin decir nada, y en las micros y ascensores los hombres dan preferencia a las damas, yo con todo eso en una semana reflexione, debo reconocerlo, lo más provinciano del mundo....."pucha que son evolucionados en la capital".

Esto puede llegar a ser el orgullo de cualquier Santiaguino e inclusive tomar ribetes de propaganda política de algún con un ministro diciendo "pues si en Chile somos un país desarrollado" o bien al "abanderado" (cada vez que dicen eso se me imagina al aludido(a) de turno como la Bolocco y su foto con la bandera de nuestro país vecino) de la oposición hablando demagogicamente de como es el "Chile de Hoy". Déjeme decirle que esta equivocado,  que la gente hace fila para tomar micro, porque sino lo hace alguien de la fila te recordara a tu parentela y lo muy estúpido que eres al tratar de tomar el transantiago, porque la micro se llena  como una lata de sardinas y avanza a 18 mts por hora.

Pero que tiene que ver el transantiago con ser santiaguino se dirá ud.?? pues mucho, ya que cuando por la mañana me vine en micro, ya desde hace un tiempo lo hago por diferentes razones,  estar en la fila y ver como la micro se llenaba para después hundirse en un taco de proporciones mayúsculas de tamaño 72, no me pareció extraño a lo cual pensé sonriendo, soy un santiaguino más, soy una ovejita del rebaño de esta gran ciudad.